El álbum familiar dejó de ser algo privado. Las primeras vacaciones del bebé, el cumpleaños de los mellizos, la graduación del mayor… Todo pasa a ser de conocimiento público gracias a Facebook, Twitter y otras redes sociales. ¿Alguna vez te detuviste a pensar si estás perjudicando a tus propios hijos?
“Nuestros hijos despiertan en nosotros muchos sentimientos de amor, orgullo y pasión. Nos emociona cada cosa nueva que hacen y es lógico querer compartirlo con los demás: amigos, abuelos, primos… Las redes sociales permiten desplegar todo esta necesidad, de manera instantánea, a mayor cantidad de personas, tanto conocidas como desconocidas”, explica a Sigue leyendo